Le damos la bienvenida a Espantapajaros en un ambiente agradable y cálido.

El territorio que rodea el Lago Llanquihue logra consolidarse gracias al esfuerzo conjunto de los colonos alemanes y los habitantes del cercano archipiélago de Chiloé.

Su huella podemos verla, no solo en la construcción de casas, galpones e iglesias, también en la transformación de tierras inhóspitas en campos aptos para el cultivo y la crianza de animales.

Desde entonces se ha desarrollado en la zona un interesante encuentro de culturas, a partir del cual nace la cocina fusión Chilota-Alemana, que es la fuente de inspiración de nuestro Restaurant Espantapajaros.

El ambiente exterior de nuestro restaurante
vista volcan Osorno

Nuestro restaurante posee espectaculares vistas hacia el lago y los volcanes. El fogón prepara a la vista el tradicional asado al palo, método de cocción que adquirieron los colonos alemanes al llegar a esta zona y comenzar su asentamiento junto a carpinteros chilotes.

Porque las buenas noticias nunca vienen solas, el ambiente exterior de nuestro restaurante tiene mucho que ofrecerte. 

Vista panorámica del Lago LLanquihue y el Volcán Osorno, recintos y animales de granja a un paso de nuestro restaurante, amplio parque infantil para grandes y pequeños… Aquí todo es posible.

Un ambiente sereno, exótico y acogedor.

El ambiente interior de nuestro restaurante
fotos interior y comida restaurante

Descubra nuestro restaurante construido, con maderas de nuestro campo labradas, imitando un galpón sureño a un paso de Puerto Octay y Frutillar. Decoraciones vintage, adornos familiares, mantel de cuadros, te sumergirás en una decoración única, inspirada en la cultura alemana.

Al igual que nuestra decoración, nuestra carta ofrece una amplia selección de especialidades locales y alemanas. Tradicional asado al palo, kuchen, spaetzle, sauerkraut y repollo morado…

Recetas que prometen un momento de desconexión durante tu día.

En días lluviosos o inviernos fríos, disfruta del cálido interior del restaurante mientras disfrutas de tu plato caliente cocinado al fuego de la leña.

Cuando hace buen tiempo, siéntate en la terraza y observa a tus hijos maravillados con los animales y los juegos al aire libre. Gracias a nuestros amplios ventanales, también podrás admirar el volcán o saborear un pisco sour.